Es solo el inicio ... [TRAMA | ESTACIONARIOS, CIUDADANOS, ASESINOS]

¿Acaso quieres ser

el siguiente en morir?

Una enorme brecha en el muro fue abierta minutos atrás, y tan solo eso fue necesario para que los titanes comenzaran ya a iniciar su camino hacia los muros, con el único fin de entrar sedientos de ver sangre humana derramarse. Los estacionarios, junto con los escasos nuevos reclutas, por ahora conforman la única esperanza de los ciudadanos, de poder ser rescatados y huir de aquella inesperada situación de terror, deberán cumplir su labor de proteger a los ciudadanos y retener a los titanes que amenazan la seguridad de estos mismos, claro que no sin antes recibir las ordenes de formación de sus superiores. Una barricada, improvisada pero funcional para algunos estacionarios fue puesta como única defensa mientras estos eran reunidos para las asignaciones de grupos y de la misma forma la planeación de estrategia, impidiendo así temporalmente el paso de los titanes, sin embargo aquella red y pese a que la idea funcionara en un inicio no resultó ser ni siquiera un obstáculo para los titanes que comenzaban ya a luego del poco tiempo hacer acto de presencia dentro Trost.

Desesperación, junto con manchas de sangre, gritos, llanto, sonidos de pisadas y del peculiar rugir de los titanes que se acercan cada vez más, ¿habrá acaso escapatoria? , para la mayoría de la gente que hasta ahora había intentado escapar un rotundo ‘no’, era la única respuesta, los titanes ya habían entrado y los estacionarios aún se encontraban planeando una estrategia, tardando demasiado en ello, pese a que tan solo se tratasen de unos escasos segundos, el tiempo parecía transcurrir demasiado lento para las víctimas, para aquellos desdichados que terminaban en las garras de esas bestias con forma humanoide. El número de muertes iba en aumento constante con cada valioso segundo perdido, ya no era cuestión de minutos u horas, cada instante era un preciado tiempo perdido en el cual una víctima caía. Con cada minuto la dignidad que la humanidad comenzaba a recobrar se venía cada vez más abajo, nuevamente luego de 5 años presas de los titanes por una vez más.

A la lejanía, aún a una distancia prudente en la cual queda solo en ti la elección de si escapar o ir hacia el peligro; un momento en que una decisión debe ser basada en el bienestar propio, pese a lo frío que pueda llegar a ser, la vida como buen cuento de matar o morir, pese a que no se sea el asesino directo, el dejar morir a a alguien más a costa de haber tenido la oportunidad de salvarle, es básicamente lo mismo. Un niño, de no más de 10 años, junto a otra menor de tan solo 5 años al parecer indispuestos a escapar pese al peligro, indispuestos en sí a dejar el ya cadáver de quien parecía su madre atrás aunque aquel acto les costase la vida, ignorando el peligro, solo concentrados en aquellas lagrimas rodando por sus mejillas y en tratar de ‘despertar’ a lo que ya se podría llamar cadáver de su madre. Con pasos torpes y despreocupados, un titán de aproximadamente 10 metros pasea merodeando el lugar, aún sin percatarse de los menores, si embargo, el acercarse a estos mismo es prácticamente un suicidio.