Jungbrunnen {Afiliación Normal}

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La segunda guerra mundial ha estallado ya, y por todas partes rondan las malas noticias: hambre, llanto, destrucción, centros que no dan abasto a la ingente cantidad de heridos, la cifra de huérfanos aumentando, familias enteras destrozadas.

La muerte ha cobrado miles de víctimas, y no parece estar satisfecha todavía.

Ante este cruel y negro escenario, el centro científico A.L reabre sus puertas nuevamente en 1.939, con la clara intención de ayudar. Su fundador, Armand Luttenberger, que en paz descanse, creó la institución hace diez años, pero por falta de capital se vio obligado a cerrarla. Ahora, Edward Mausa, su nieto, está a la cabeza de una renacida edificación. El centro suple a las naciones involucradas en la guerra -sin excepción alguna- con medicamentos para sus hombres, y recibe también a los heridos en combate, brindándoles un espacio donde puedan retirarse dignamente y en el cual se hace lo posible por tratar sus heridas y traumas. La prestigiosa institución es reconocida, además, por ser un internado para que los hijos de las familias más acomodadas del mundo se especialicen en las artes de la medicina, o por el contrario, para que se trate su enfermedad con la seguridad de obtener mayor garantía de progreso positivo.

El centro científico A.L se encuentra ubicado en Nueva Orleans, y cuenta con los científicos más cualificados del mundo, además de profesionales en cada área de la salud, encargados de impartir las clases a los estudiantes y por último, pero no menos importante, unas instalaciones completas y de última generación para las prácticas de los mismos. Los graduados pueden elegir trabajar dentro del edificio, o bien, ampliar sus horizontes.

Los estudiantes que salen del centro son los mejores posicionados de todo el campo laboral. Muchos, para desgracia del centro, que ha demostrado ser neutro en cuanto al conflicto bélico que actualmente se desarrolla, se encuentran apoyando alguno de los bandos. Sin embargo, la institución no deja que este hecho les desanime, y sigue en la búsqueda de mejores medicinas para curar los males que ahora aquejan la humanidad.